Por la periodista Claudia Cuneo
Un reportero gráfico es mucho más que un hombre dotado de una
Nikon
que le cuelga del hombro. Es un artista. El reportero grafico es un artista porque puede con su lente captar la instantaneidad de un momento y eso lo hará irrepetible, único, histórico, original. Es que son artistas, natos creativos, capaz de hacer de un hecho noticioso una obra de arte y es que la percepción no es algo que se aprenda, es un don único con el que algunos nacen, lo adquieren con la práctica, la educan cada día en una nueva toma callejera… Los reporteros gráficos, que llevan por defecto un periodista a cuestas, pueden suplir con su imagen un texto, pueden poner en imágenes las palabras, pueden reproducir una emoción propia o del entrevistado y eso queda latente en la fotografía que toman, solo hay que verlo en la profundidad de la imagen. El fotógrafo que puede narrar con luces, sombras, colores, ángulos y con poca teoría un hecho de la vida cotidiana y hacerlo en la foto digital tan real como el momento mismo, es un artista, porque tiene en su piel una sensibilidad especial, la sensibilidad social impregnada en los poros y eso le permite transmitir a los otros, una visión distinta de la vida, de la realidad, de su pueblo, de su gente, y es que la foto también habla de él, de sus dolores, de sus preocupaciones, de sus temores, de su vida…La objetividad, aunque buscada aquí es menos posible de lograr que en el periodismo gráfico, y es que una imagen vale mucho mas que mil palabras, incluso sin contexto escrito, sin epígrafe, la foto puede hablar y contar historias.
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